Desde luego, el lector deberá tomar en cuenta que, como católico y tomista, sostengo que esta postura es la verdadera y, por supuesto, estará dirigida principalmente a los católicos, como se darán cuenta en la redacción. Esto, sin embargo, no será obstáculo para analizar la materia con objetividad e imparcialidad en la medida de lo posible, tampoco impedirá que otras personas de distintos credos o posturas filosóficas puedan servirse de esto, y mucho menos que el lector -sea tomista o no- pueda dar objeciones a definiciones, conceptos y argumentos que aquí se presentan.
¿Qué es la epistemología y por qué tiene importancia?
Como dice Peter Coffey en su obra Epistemology -de la cual nos serviremos ampliamente para esta serie de artículos-, las ciencias positivas se limitan a
estudiar una porción limitada de la experiencia humana, pero la filosofía se
dirige a explorar todo el dominio. Se trata de cuestiones como: la naturaleza
del hombre y del universo, su origen y destino, el sentido de la vida y cómo
deberíamos vivir. Incluso hasta explorar qué tanto nos es posible saber de
estas cosas, qué tanta certeza puede tener de esto, qué es el conocimiento en
sí mismo, cuáles son sus límites y condiciones.
Estas son las preguntas principales con las que se iniciará la cuestión. Bien, la epistemología trata las últimas cuestiones mencionadas: ¿podemos saber de aquellas cosas?, ¿con qué certeza?, ¿Qué es el conocimiento y cuáles son sus límites y condiciones? Explicado todo, definiremos a la epistemología como la ciencia que estudia el conocimiento humano, sus fuentes y su certeza (Coffey, 1917).
El autor de este texto afirma que la ciencia -las ciencias positivas específicamente- puede abarcar toda la realidad, incluso hasta estudiar a alguna deidad, y a consecuencia de que a dado resultados negativos sobre la existencia de alguna, se ha inventado la idea de que la deidad está más allá de los límites de estas -afirmación que es un anacronismo-. En este caso el problema está en claramente no conocer los límites del método de las ciencias positivas ni su objeto de estudio o de ignorar los aspectos de la realidad que no pueden ser abarcados por aquellas, también desconoce que más allá de este hay otros métodos que llevan a distintos tipos de ciencia, con otros objetos de estudio, como la teología natural.
Para el católico, esto es muy importante porque, de hecho,
esta fe no puede reposar en la mente de alguien que sostenga el escepticismo
filosófico, naturalismo o el agnosticismo, ni puede ser defendida la existencia
de un Ser Supremo tomando como base el monismo; mucho menos una postura como la
de este calvinista en cuestiones epistemológicas.
Podría decirse, hoy en día que, en cuanto a la
religión, la sociedad no se encuentra principalmente en la cuestión de cuál
denominación cristiana es la verdadera: si el catolicismo o cualquier otra. Quizá
lo que está en principal debate se da entre catolicismo y agnosticismo,
cientificismo, naturalismo, etc...
Bibliografía
Coffey, P.
(1917). Epistemology or the theory of knowledge: An introduction to
general metaphysics. New York: Longmans, Green and CO.
Comentarios
Publicar un comentario